lunes, 25 de agosto de 2014

NUESTRA Y, SIEMPRE NUESTRA, MATERPATERNIDAD

Hace algún tiempo que tenía pendiente escribir un post sobre los comentarios, agradables y menos agradables, que he ido recibiendo de forma gratuita desde que nació nuestro bichillo. No es una manera de ofender a nadie, Dios me libre, simplemente una manera de expresar como me siento, que es otro uso que en alguna ocasión le he dado también a este blog. Tengo muchas ideas en la cabeza pero intentaré expresarme con la mayor claridad posible.
Gracias a Dios nuestro bebé, ya no tan bebé, es el mejor regalo que tenemos. Es un regalo de la vida, un regalo al que cuidar, amar y acompañar para siempre. No es nuestro, es de la vida y nosotros tenemos el deber de estar. Y estamos. Estamos de día y de noche. Yo estoy 24 horas y espero estar muchas más. Intentamos en todo momento satisfacer sus necesidades y mirar más allá de nosotros, como adultos. Nos intentamos poner en su lugar, entender y respetar su desarrollo y su mundo infantil. Hemos visto que necesita presencia continua, 24 horas, de sus padres; amor y cariño continuo; juego respetado, no dirigido; experiencias en y con el entorno; teta y mas teta, cuando tiene sed, hambre, mimos, llantos, miedo...24 horas; hasta hace unos meses llevarle bien cerca de nuestro cuerpo, en brazos, fular, mochila...ahora corre y salta, se aleja y vuelve, pero sigue siendo porteado; hemos visto que la alimentación autorregulada sin papillas ha sido un acierto porque hemos respetado todo lo que podíamos su ritmo en la alimentación; aunque no lo pensábamos utilizamos pañales de tela y hemos visto que su piel atópica no ha tenido ni un solo brote; hemos visto que necesitaba moverse libremente desde los pocos meses de nacer y que el suelo ha sido de mucha ayuda para su motricidad; hemos visto que los tres necesitamos dormir juntos para descansar bien, que la lactancia es sencilla por la noche y que es una maravilla dormir con tu hijo y despertate con él. Podría poner muchas cosas más, estoy segura, pero no hace falta. Todo esto ha ayudado a que el bichillo se esté desarrollando bien, a su ritmo, como su cuerpo necesita. Nos habremos equivocado mil veces y nos equivocaremos millones más pero estas cosas ayudan a Marcos y a nuestra maternidad-paternidad. Lo vuelvo a repetir, a nuestro hijo y a nuestra vida. Me encanta como es Marcos y como estamos siendo con él. Disfruto día a día y hora a hora aprendiendo cómo quiere que seamos con él. Aprendo a ser una persona más tranquila y a esforzarme para ofrecerle mi cariño y respeto en todo momento, hasta en los momentos mas delicados. Y espero no cansarme de ofrecerme a él. De ofrecerle mi tiempo y todo lo que necesite y le pueda dar.
Me da rabia la gente intolerante que cree que puede opinar sobre un tema tan delicado y personal como es la maternidad-paternidad. Opina sobre otras cosas, que esta sociedad tiene la capacidad de ofrecer millones de situaciones y cosas mundanas sobre las que opinar, pero no sobre nuestra crianza. Porque ya lo he dicho, nuestra, única e irrepetible, perfecta e imperfecta, pero siempre nuestra.
Y ojalá os sintais, que seguro que si, tan plenos, alegres, llenos de miedos, exigidos e imprescindible para alguien como lo somos para nuestros hijos.
Ánimo a todos. A las mamás, a los papás, a los que toman papillas y a los que se alimentan guarreando con las manos, a lo chupópteros y a los biberópteros, a los que chupan las zapatillas y a los chupan chupete, a los que empujan carro y a los que cargan, a los que duermen y a los que no, a los de escuela infantil y a los que educan en casa, a los que...pero que nunca nos falte el amor incondicional, el respeto siempre y la mirada sencilla a través de los ojos de nuestros hijos.

Un abrazo respetuoso a todos y en el próximo post comenzaremos a construir una mesa de luz.


3 comentarios:

  1. me ha gutado mucho, me sentía como si leyese mi diario... porque se trata de amor, el que damos a nuestrxs hijxs, el que nos hace estar, acompañarles dias a dia, las 24 horas, el que nos hace estar despiertxs aunque tengamos sueñx, y el que nos hace querer ser mejores pese a nuestros errores, en vez de hundirnos en ellos... gracias mar por estar presente y por compartir todo esto con nosotras, por entendernos y escucharnos, por hacer red, y por querernos

    ResponderEliminar
  2. Pues eso, a cada uno lo que le funciona, y para todos, amor del bueno.

    ResponderEliminar
  3. Gracias por tus palabras Mar. Gracias también por ser una gran amiga siempre dispuesta a ayudar desde el respeto y desde el amor y por demostrar con ellos tanto cariño hacia nosotros y hacia nuestras hijas.

    ResponderEliminar